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antigua carcel Murcia

La propuesta pretende invertir los espacios de la antigua Cárcel de Murcia, su arquitectura y su memoria, no sólo en términos materiales sino también en términos inmateriales, transformando una prisión en un Jardín. Se invierten así, aislamiento por comunicación, muros por aperturas, oscuridad por luz, interior por exterior, lleno por vacío, pesantez por ligereza…

Espacios entrelazados: Se vacía el corazón del antiguo edificio para construir en definitiva lo justo, lo preciso y dotar de flexibilidad al conjunto.
Re-uso y modificación: Se reutiliza la estructura existente que se desmonta en las naves centrales para abrir un espacio público, El Jardín, corazón del nuevo centro cultural, que contiene un paisaje propio mediante plantaciones vegetales e introducción de luz y ventilación.
Distribución y descompresión: Los usos se ubican en el perímetro de El Jardín y se articulan en torno a él.  Mediante El Jardín se descomprime el núcleo del edificio.
Ligereza y atmósfera: Se abre el interior a la luz, a la vegetación y a una circulación clara, a la permeabilidad desde el exterior.